Nuestro
objetivo es despertar en los niños/as la curiosidad por el libro, ese leal
compañero de la humanidad a lo largo de la historia, y, como consecuencia, la
afición a la lectura.
La
tarea no es fácil, por cuanto puja a nuestro alrededor una cultura audiovisual
cada vez más dominadora.
El
libro ha sido siempre, y debe seguir siéndolo, un instrumento liberador,
soporte de la conciencia individual de los hombres y de las mujeres; una fuente
de placer y de conocimiento, ya que consiste, entre otras cosas, en un mundo
fascinante que procede de los sueños y de la aventura de la vida.
La
edad de los niños es, tal vez, la más propicia para entrar en ese mundo cuya
belleza puedan perder para siempre cuando, ya adultos, queden atrapados en las
redes de las que escapó Peter Pan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario